Fiesta de la Ascensión - “Con la Ascensión de Jesús, se confirma un mandato a la Comunidad Cristiana: testimonio”

Saludo fraterno y de compañero de caminada para todas y todos.

Saludo en medio de noticias que han circulado en esta semana y que nos llenan de esperanza: hemos celebrado el día del maestro en las dimensiones de Jesús maestro y de san Juan Bautista De La Salle como patrono, este es tiempo de preparación de formación en varias comunidades en distintos sitios del país; tiempo de acompañamiento a muchas gentes que todavía sufren a causa del pasado invierno y que ya no son noticia en los medios de comunicación (por lo menos en aquellos que representan los grandes conglomerados económicos) y la noticia de la elección episcopal de uno de los primeros lectores de estos aportes de estudio de evangelio: Orlando Roa Barbosa ahora obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Ibagué; que la oración que nos une y hermana, la oración que nos ayuda a clarificar y comprender el proyecto de Dios, la oración que nos anima y acompaña en el caminar discipular, la oración que nos enseña y corrige sea en este tiempo signo de comunión y de gratitud para con nuestro Dios porque se sigue revelando en todos estos pasos y aconteceres.

Celebramos la fiesta de la Ascensión de Jesús, oportunidad que nos invita a volver sobre la fuente de esta clave simbólica en la tradición cristiana (simbólica cultural – religiosa de representación social) y signo de la continuidad de la tarea del Proyecto de Jesús en la Comunidad de fe, comunidad eclesial. El evangelio que se lee y desde donde se reflexiona este acontecimiento salvador – liberador es Mc. 16, 15 – 20.

1. Acercamiento Contextual

Al volver sobre el evangelio de Marcos, que se viene reflexionando en este ciclo B, es importante recordar algunas claves contextuales que sirven para mejor comprender sentidos e intencionalidades presentes en el escrito. Y, además, es una clave de ayuda para formar y acompañar la profundización en el caminar de fe nuestra y de nuestras comunidades.

Algunas referencias contextuales a las que hemos hecho referencia anteriormente son:

1) Un evangelio kerigmático, es decir, de anuncio, de invitación, de acompañar a la conversión en y desde la fe;

2) Evangelio que es Buena Noticia en sentido pleno porque muestra la transformación de la vida a la que nos llama nuestro Dios, Padre y Madre, en Jesús, enseñando a vivir de manera más humana, más integral en unidad con la Creación toda, mostrando como principio vital central la justicia de Dios fundada en el amor… esto sí que es Buena Noticia en medio de una sociedad que se inspiraba en la esclavitud, en la gens, en la ciudad desconociendo al campo, en el comercio que abandona y olvida a quienes el mismo sistema margina del sistema productivo, de comercialización y de consumo… y en especial es Buena Noticia porque libera y salva de las tradicionales formas religiosas que son fuente de sometimiento, alienación y justificación de esas formas y estilos de vida en condiciones contradichas para muchos/as.

3) Evangelio que acompaña los procesos de ruptura, transformación y adopción de nuevas formas de vida fundamentadas en Jesús. Las rupturas son con las formas religiosas tradicionales que representaban el templo, Jerusalén, sus autoridades y sus tradiciones que para el siglo primero, en tiempos de Jesús, se habían convertido en justificadoras (y por tanto aliadas) de la invasión del imperio romano; representaban también una forma religiosa que sólo se preocupaba de rendirle culto a Dios/dios pero que no implicaba relaciones con la realidad, con el entorno, con la creación, con la justicia… era un etéreo culto alienante y alienador… por ello es que es Buena Noticia como se dijo antes.

4) Es muy importante no perder de vista que este evangelio, el evangelista y la comunidad que está detrás de su composición quiere acompañar los procesos de transformación de mentalidad, de imaginarios, de representaciones simbólicas, de sentidos que estaban arraigados en las gentes judaítas de ese tiempo; que al mismo tiempo asume una clave pedagógica a lo largo de todo el escrito la formación de los/as discípulos/as, discípulos/as continuadores del proyecto de Jesús… formación asumida y realizada como contraste – conflicto con su entorno y con las actitudes, sentimientos y comportamientos asumidos por muchos dentro de la misma comunidad…

Todo esto es muy importante para acompañar nuestro propio caminar de hoy, nuestras comprensiones de Proyecto de Dios en Jesús, nuestros compromisos integrales en las dimensiones personal, comunitaria, eclesial, social y ecoambiental, nuestros compromisos, nuestras maneras de mirar y asumir la fe, pues no basta con decir: “Señor, Señor” (cfr. Mt. 7, 21 – 27), es decir, una manera de comprender la fe solo como un rendir culto, reducir la fe al ámbito de los sacramentos, la liturgia, la oración. Por tanto, es un preguntarnos por lo que dice y significa nuestra experiencia y caminar discipular en medio de la vida y la realidad de la sociedad, de las problemáticas, necesidades y sueños de las gentes, del pueblo concreto, y en ellos pensar y ser parte de los proyectos de país, de nación, sociedad, etc.

2. Acercamiento Literario – Contextual

El evangelio que se lee este domingo ha de tener en cuenta el inicio del evangelio mismo, pues la perícopa que se lee este domingo es el cierre del mismo. El evangelio Marcano empieza con el anuncio de una Buena Noticia (evangelio): Jesús es esa Buena Noticia (1,1) y se amplía en la Buena Noticia (evangelio) que anuncia Jesús luego de la traición en contra del Bautista (1, 14 – 15)… así entonces Jesús es Buena Noticia y la obra que realiza es Buena Noticia… y ahora en el final del evangelio de Marcos encontramos la invitación a los discípulos a proclamar la Buena Noticia. Se cierra así una estructura quiásmica de redacción que indica sentido e intencionalidad del evangelista y de la comunidad compositora del evangelio.

– El texto 16, 9 – 20 es reconocido como un apéndice posterior añadido en el siglo segundo, lo cual indica que no forma parte del mensaje original del autor y de la Comunidad. Interesante sí, cómo a partir de este texto se percibe ya la formación de un contenido, una tradición, una simbólica de unidad en las comunidades cristianas:

·         vv. 9 – 14 recoge el contenido de la tradición, especialmente la compartida con la fuente lucana, ver p. ej: “Después de esto, a dos de ellos que caminaban cuando iban a una aldea” v.12, esto no aparece en el relato de anuncio de resurrección en Mc. (vv. 1 – 8).

·         v. 14 recoge una expresión interesante: “…estando recostados a la mesa ellos”, simbólica clave de la resurrección que viven los/as creyentes y que aparece en otro relato clave de resurrección (Mc. 6, 30 – 44 {específicamente vv.39 – 40}), ahí aparecen las señales de la resurrección en y desde la Comunidad: compartir solidaria y fraternamente en organización comunitaria y, fundamentalmente con una mentalidad nueva, con unos imaginarios personales y colectivos de liberación, con una conciencia de renovación en las relaciones personal y del entorno, etc..

·         vv. 9. 14 presentan un círculo de resurrección centrado en la figura de los “recostados” en la mesa: en la época solo se recostaban para comer los que eran reyes, amos o señores, en cualquier caso hace referencia a quienes tenían el poder de decidir sobre sus propias vidas. Aquí el autor bíblico hace una exigencia de metanoia (es decir, cambio de mentalidad y de actitud) para hacer real y posible la transformación de las tradiciones religiosas que generan ignorancia o esclavitud, así como el cambio de la realidad, del medio, del contexto social – político – religioso – cultural – económico. Así también, con la metanoia se quiere expresar el poner los intereses, los sueños, las intencionalidades, que nacen y residen en el interior humano, ponerlas según la voluntad de Dios (hacer la justicia). Se puede expresar como “cambiar de corazón”, y también como, el “abrir los ojos” que se hace referencia en varios textos bíblicos, por ejemplo en Lc. 4, 14 – 21.

…Así, recostarse para comer es señal de esperanza, de realización de una profunda transformación desde el interior de la persona, y pasa por las dimensiones de la economía y la política…

… satisfacer la necesidad de manera organizada y en clave de compartir comunitaria y solidariamente.

… vuelve la señal de la esperanza, señal de la posibilidad de la vida, señal de la salvación – liberación.

Todo este es un contexto clave para comprender el relato que se proclama este domingo: vv. 15 – 20, no se puede dejar de lado para hablar de lo que sigue, pues es su marco de comprensión…

– vv. 15 – 20 muestra una estructura literaria que recuerda precisamente muchos de los aspectos antes anotados en el contexto general del evangelio, como en el contexto de este añadido posterior al evangelio original (ver archivo adjunto de esta estructura literaria y una traducción desde la fuente más reconocida como original):

vv. 15 – 16 – Mandato de anunciar la Buena Noticia

vv. 17 – 18 – Señales de la Buena Noticia

v. 19 – Liberación de antiguos esquemas religiosos y compromiso de persona y comunidad

v. 20 Confirmación de cumplimiento del mandato, responsabilidad de la

comunidad, señales eficaces de la instauración del reino

Vista de esta manera la organización estructural y literaria del relato permite concluir varias cosas:

1) Se completa la figura del cumplimiento de la misión que no aparece en la redacción original que llega hasta el v. 8 propiamente… Pareciera que el autor original del evangelio deja en suspenso el cumplimiento de la misión como una manera de convocar a los oyentes del evangelio a hacerse discípulos/as de Jesús y, así, asumir la culminación de la tarea empezada por Él.

2) El cumplimiento de la misión requiere reconocer a Jesús como resucitado, y resucitado en dos formas: la personal, pues su vida, enseñanzas y prácticas son aprobadas por Dios y por ello está vivo, no es condenado… motivo por el cual hay una liberación frente a las comprensiones religiosas y de mandamientos que sólo llevaban cargas y reprobaciones que hacían del sentimiento de culpa una carga más sobre las exclusiones e injusticias que vivían las gentes.

De otro lado, la resurrección de Jesús se concreta y realiza en la comunidad que asume, desde una mentalidad y unas prácticas nuevas (recostarse en la mesa) de la relación con Dios, con la vida, con su entorno y sus semejantes, asume el proyecto de Jesús y lo hace realidad… por ello concluye en la comprobación que las señales se hacen realidad.

3) Rompimiento con los imaginarios, las tradiciones, las prácticas religiosas que hacen de Dios una figura distante, acusadora y castigadora contra el género humano, es en verdad una liberación – salvación.

– El contexto socio – cultural de la época nos orienta en la comprensión del sentido e intencionalidad de las “señales” que se describen en el texto, ellas no representan lo que hoy se suele comprender en una mirada literal sobre el texto y leída en clave religiosa de una falsa comprensión de los milagros.

El valor central en la cultura mediterránea del siglo primero es el honor, de él depende la dignidad de la persona y el reconocimiento en su entorno… es lo que hace plena la vida. En este contexto, muchas de las prácticas religiosas, los mandamientos que se imponían sobre las gentes iban en la dirección de alcanzar el honor… pero realmente lo que hacían era reconocer el honor en otros, eran normas para reconocer y legitimar a quienes tenían la autoridad y ejercían poder… así estas señales contadas en el evangelio son un camino de transformación de esas normas y prescripciones; las señales que anuncia el evangelio son un camino de liberación con esas formas religiosas que someten y alienan, son auténticas señales de transformación de las relaciones con Dios y con el entorno, estas señales representan mandato verdadero para la salvación, es decir alcanzar honor y gloria y reconocimiento delante de Dios y transformación de las condiciones de vida en el presente, condiciones de vida que por centrarse en la justicia hacían que de verdad se diera el honor y la gloria (cfr: Salmo 8, la dignidad humana es coronada en honor y gloria).

De ahí que es necesario hacer una lectura crítica a las explicaciones que se hacen hoy de estas señales como “milagros”, a las prácticas que asumen de manera literal estos anuncios y olvidan las claves de liberación que ellas representan… Y se hace necesario el que nos planteemos en un lenguaje de hoy y con señales de hoy las simbólicas de representación de la liberación y salvación ofrecida por Dios en Jesús y que nos hacen dignos y merecedores de honor… como personas y como creación toda.

– Llama la atención el juego entre el creer y el no creer que aparece en el texto. El creer es el que permite poner en acción las señales, permite percibir el cumplimiento y verificación de la resurrección como actualización permanente… en Jesús y en la Comunidad. Ese creer y no creer que describe el relato se convierte en una clave para mirar y evaluar a la propia comunidad y a cada discípulo/a.

– Cierro estos aportes para el estudio literario contextual mirando el v.19. Si se aprecia con cuidado este es un contenido totalmente distinto en el relato… una clave de comprensión en dimensión cultural – simbólica, responsabilidad de la comunidad cristiana de creyentes.

En el imaginario de representación religiosa (ideológica y de valoración social) en la época, y dado el contexto helenístico que estaba en juego, junto al contexto de las tradiciones de Israel, la figura de ser llevado al cielo es signo del máximo honor y dignidad… para los griegos representa estar en el olimpo de los dioses, para los semitas representa estar lleno de Dios, estar en Dios… así este verso habla de la dignificación máxima de Jesús…

Y su forma de redacción en medio del mandato de anunciar la Buena Noticia indica que ahora es la Comunidad de creyentes y seguidores/as quien realiza esta tarea que lleva a la misma dignificación y honor, ya no sólo entre los congéneres, sino delante de Dios mismo, ya no sólo delante del mundo, sino como testimonio para todas las naciones.

3. Acercamiento Teológico – Pastoral – de Actualización

Luego de revisar algunos de los sentidos e intencionalidades que están detrás de las palabras del evangelio es importante y necesario volver la mirada sobre nuestras palabras, nuestras prácticas, nuestros credos expresados en la vida cotidiana, no sólo como formulaciones doctrinales… y al volver sobre ellas establecer juicios críticos, de valoración y de seguimiento en la caminada discipular de Jesús.

Al mirar el texto y mirarnos a nosotros/as mismos/as, Jesús sigue trastocando la escala de valores del mundo y es también la tarea de las comunidades cristianas que asumimos esta misión discipular.

Y pensando en esto, al volver sobre la actualización del texto, al contemplar las señales que hoy nos pide el mundo recuerdo un breve escrito que hice para hablar precisamente de la Educación en Colombia y en muchos de nuestros países:

« 1) El contexto general de la educación colombiana. Hemos de reconocer que la insistencia por la implementación de los sistemas de calidad, unido a una perspectiva de educación para el trabajo son las políticas públicas que sobre educación están obligados a asumir y a realizar los gobiernos latinoamericanos debido a que quienes imponen estas políticas son el banco mundial y el fondo monetario internacional... es decir no son las entidades de la cultura en el mundo (como la Unesco) quienes hablan y dirigen las políticas educativas, sino que es la banca multilateral...

En el trasfondo de todo esto hay una presencia de la economía de capital la que está por encima de la persona, de la cultura y de la formación para la vida la que se impone como visión de la educación.

2) Con base en el contexto anterior puedo plantear el contexto de la educación católica en nuestro país... y la llamaría como contexto de "sumisión"...

- De una parte están los decretos de control sobre la educación que está dictando el ministerio de educación y en los cuales rigen no sólo los contenidos, sino las políticas de educación antes anunciadas.

- De otro lado, la iglesia católica, y aún las comunidades religiosas, en el afán de "cumplir" con los requisitos de la acreditación de calidad, casi que de manera acrítica vienen implementando marcos de administración y de control de la educación dentro de sistemas de gestión de la calidad que son empresariales... industriales (es decir, la educación como negocio... no como servicio)

- Para la mayoría de los colegios y universidades confesionales, sus directivas y aún para las jerarquías de la Iglesia, lo que han buscado es mantener "un espacio de la clase de religión" como identidad cristiana de la educación, aunque esto en realidad no es "ni chicha, ni limoná", se conforman con tener la clase de religión, y esta sin contraste real con los demás espacios de formación en el saber y el conocimiento.

- Generalmente no se asume, ni se discute de manera amplia y ciudadana esta problemática, solamente se conforman con discutir la temática en las reuniones que sostiene la conferencia episcopal con el presidente de la república, pero de ahí no trasciende una discusión de política pública donde la iglesia delibere y exprese libremente su palabra...

- Mayor ha sido el trabajo de los movimientos sociales y estudiantiles que vienen expresándose y manifestando desacuerdos con estas políticas educativas... pero las organizaciones eclesiales (de las diferentes iglesias) la educación católica en particular no se ha hecho pública en su participación...»

Si creemos que Jesús sube al cielo como representación de la dignidad humana, de la realización del proyecto de Dios en la justicia, entonces con Él sube la condición de la Vida toda, la vida humana en todas sus dimensiones y relaciones y ha de concretarse en escenarios como el de la educación.

Hoy, igual que ayer, el anuncio de la Buena Noticia ha de ir acompañado 
de signos de vida y de liberación en todos los escenarios de la vida y del acontecer humano.  Somos enviados/as a anunciar la Buena Noticia, no a ser mensajeros de juicios apocalípticos o de condena; somos mensajeros de Buenas Noticias porque encarnamos testimonio de alternatividad frente a un mundo que no tiene a la Vida, la dignidad humana, la justicia como sus valores más importantes.

La Ascensión de Jesús abre a un tiempo nuevo: el tiempo del testimonio, el tiempo en que los/as discípulos/as en comunidades incidimos en la realidad para transformarla, construimos experiencias y prácticas novedosas que muestran al mundo la radicalidad de lo que creemos y aportamos a la humanidad y a la creación toda… Y esto se realiza en tareas concretas como la de la educación y, como ella, en todos y cada uno de los escenarios y con los carismas que hemos sido bendecidos a lo largo de la historia…

Hemos de preguntarnos: ¿para ser reconocidos por el entorno, por la academia, por la ciencia, por los gobiernos y estados asumiremos sumisamente sus proyectos con tal que nos dejen un espacio para la oración y el culto? (cfr. Jn 11, 48).

¿Cuál es el rostro de Dios que reflejamos en nuestras prácticas, creencias, organizaciones… y en el cómo las realizamos?

Va mi abrazo como cada semana, abrazo lleno de cariño y de recuerdo.

Feliz Semana, para todas y todos…

Dios les guarde.

Unidos en Jesús y en María; unidos en Jesús que es Señor de la Vida y en María que nos enseña a caminar discipularmente en seguimiento de Jesús.

César

La Ascensión de Jesús abre a un tiempo nuevo: el tiempo del testimonio, el tiempo en que los/as discípulos/as en comunidades incidimos en la realidad para transformarla, construimos experiencias y prácticas novedosas que muestran al mundo la radicalidad de lo que creemos y aportamos a la humanidad y a la creación toda… Y esto se realiza en tareas concretas como la de la educación y, como ella, en todos y cada uno de los escenarios y con los carismas que hemos sido bendecidos a lo largo de la historia…

Hemos de preguntarnos: ¿para ser reconocidos por el entorno, por la academia, por la ciencia, por los gobiernos y estados asumiremos sumisamente sus proyectos con tal que nos dejen un espacio para la oración y el culto? (cfr. Jn 11, 48).

¿Cuál es el rostro de Dios que reflejamos en nuestras prácticas, creencias, organizaciones… y en el cómo las realizamos?

Notas Humanas y Divinas. Dirige Leiner Castaño García cssr, todos los domingos a partir de las 6:00 a.m. en RCN radio 93.9 F.M. o por internet en www.rcnradio.com (http://www.rcnradio.com/programa/notas-humanas-y-divinas/notas-humanas-y-divinas)