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Dans ce blog, il sera question de publier toutes les réflexions, articles, commentaires et opinions à caractère socio-économiques, politiques, culturels et religieux.


VII Domingo de Pascua. Ascensión de Jesús - Devolver la dignidad, ahí el Ascender y el Resucitar

Publié par Gabriel Manzukula Mjrrdcongo sur 4 Juin 2011, 18:33pm

Catégories : #Bible et Reflexion

Saludo fraterno para todas y todos; saludo en esta fiesta dominical en el que la iglesia celebra el restituir la dignidad a quien le ha sido arrebatada (en Jesús a quien le habían arrebatado la suya y a todo/a aquel que en su nombre “vuelve a la vida”), saludo fraterno a tantos y tantas que en este país siguen sufriendo las consecuencias del invierno pero que ya no son noticia (quiero recordar especialmente a Monpox, sur de Bolívar, desde donde Samuel Martínez* me ha escrito y pide que les recordemos y nos hagamos uno en la unidad de la oración dada la crítica situación que viven por la pérdida de casas, trabajos, cultivos, animales, etc.)… que nuestra unidad vaya más allá de la oración.

 

El Evangelio de este domingo (Mt. 28, 16 – 20) nos pone, de nuevo, en un salto de libro y de autor… así entonces nos hemos de contextualizar nuevamente para acercarnos a éste, estudiarlo, meditarlo, para desde ahí realizar actividades personales y comunitarias: catequesis, oración, homilías, acompañamiento, etc.

 

1. Acercamiento Contextual.

 

Dada la condición de volver sobre este evangelio que es el texto base de la liturgia dominical en este año considero necesario recordar algunos aspectos de lo que se ha escrito antes para, desde ahí, enmarcar la lectura y estudio de la perícopa de este domingo. El acercamiento contextual hemos de hacerlo en dos perspectivas, uno de carácter socio – histórico y cultural, y el otro, de orden literario, veamos:

 

– Ubiquémonos, nuevamente, en Siria, norte de la Palestina (país de Jesús), allí se encuentran establecidas las comunidades cristianas que hacen su proceso de reflexión y fundamentación de la fe en Jesús… comunidades de personas en su mayoría de origen judaíta que han roto con el Templo y las autoridades de Jerusalén; que tienen una mentalidad y tradiciones fundadas en el horizonte epistémico del pueblo de Israel (por tanto en la espera de la llegada del Mesías); comunidades en medio de una persecución ejercido desde las sinagogas donde se ha impuesto el naciente judaísmo oficial (rabínico) a partir de las reformas impulsadas desde la academia de Jamnia… persecución que les genera inestabilidad económica, política, social y cultural… de ahí la necesidad de fundamentar la adhesión y seguimiento de Jesús (por ello mi afirmación que este es un evangelio pedagógico, quizá el más pedagógico de los evangelios)… en últimas buscan razones desde donde comprender, justificar, acompañar y animar la propuesta de fe que revela a Jesús como el Mesías esperado y de cuyo proyecto se constituye una comunidad que tiene unas concepciones y prácticas que rompen con la tradición de sus antepasados y el contexto de su época, pero que pone en horizonte de fidelidad a la voluntad de Dios.

 

Es importante pensar en las condiciones de vida que se viven en medio de la persecución y expulsión de las sinagogas, pues, en aquella época, los judaítas vivían en sectores propios, aislados del resto de la población en las ciudades dada las características de sus tradiciones religiosas y culturales (fundada en una mentalidad de pureza que les hacía tomar distancia del resto del mundo para no contaminarse); de otro lado, es bueno recordar que a través de las sinagogas era que se establecía los contactos para la acogida, para el comercio, para la organización y vida en medio de una sociedad que los desprecia y aísla (así como ellos lo hacen con el resto de la sociedad)… así que en medio de todo esto es ser expulsados de la sinagoga implicaba y significaba ser expulsados del “barrio” o sector propio de los judíos, pero que al mismo tiempo no eran aceptados en el resto de las ciudades y poblaciones justamente por su condición cultural de judaítas… veamos pues, lo que significa e implica para las condiciones concretas de vida la situación por la que están viviendo y atravesando las comunidades cristianas que se inspiran en este evangelio mateano para su reflexión, para su comprensión de fe y animación para vivir en Jesús y en su proyecto.

 

Así entonces surge el tema que es central en todos los evangelios porque constituye el centro del evangelio de Jesús: la justicia… pues en este horizonte de realidad es que se comprende el hablar de condiciones sociales, políticas, económicas, culturales que implica la fe religiosa de Israel y de la tradición cristiana.

 

– Recordemos que este evangelio, dada su estructura pedagógica se organiza en cinco grandes colecciones doctrinales (llamadas por otros discursos), a través del cual se constituye el proceso pedagógico hacia la fundamentación del sentido e intencionalidad del mesianismo de Jesús, y por ello, justificación de la adhesión y seguimiento de él… así que en este contexto nos encontramos con el final y cierre del evangelio con la lectura que se hace en este domingo.

 

Es un evangelio que además de ayudar a comprender desde el corazón y la mente acerca de lo que es, significa e implica el nombre de Jesús como Señor y Mesías en el rompimiento cultural y religioso de las tradiciones del templo y sus autoridfades, es también (y de manera indivisible) fuente de una manera de ser y de vivir la fe en las prácticas concretas de comunidad que debe hacer resistencia a la persecución y expulsión de la sinagoga y, al mismo tiempo, hacer frente al rechazo y aislamiento del resto de la sociedad de la época, es decir, es indivisible el comprender a Jesús y la forma concreta de vivir como comunidad en organizaciones que den posibilidades económicas, políticas, culturales, sociales, históricas… constituir la novedad de vida que surge y nace de la fe en Jesús (considero esto esencial para que nos preguntemos desde nuestras comprensiones y prácticas comunitarias – eclesiales de fe lo que está significando e implicando la adhesión y seguimiento de Jesús).

 

– Adentrémonos ahora en el contexto literario del texto que se lee este domingo (Mt. 28, 16 – 20). Propiamente hay que leer todo el capítulo 28 en el marco de las cinco colecciones doctrinales para comprender sentidos e intencionalidades presentes en este relato (pues el corte caprichoso que se hace para esta lectura no permite ver la unidad e integralidad, y, además, pareciera que obligara a ciertas comprensiones “racionales” acerca del hecho que ahí se narra… y de ahí el distanciamiento de algunos/as porque la irracionalidad es más evidente en un hecho narrado así de manera suelta)… esto implica que hay que leer todo el capítulo y comentarlo como trasfondo para centrarse en esta parte final del relato.

 

El capítulo 28 tiene una composición en tres momentos como estructura literaria: vv. 1 – 10; 11 – 15 y 16 – 20. Donde la primera y la tercera parte tienen unidad temática en la narración y la segunda marca un contraste – conflicto de lo que está siendo interrogado por la comunidad como búsqueda de sentido y validez en la opción de reconocimiento, adhesión y seguimiento discipular de Jesús… en razón de este contraste – conflicto es que se comprenden los vv. 16 – 20.

 

De otro lado es necesario comprender el horizonte simbólico cultural en el que está escrito, pues la pregunta desde la razón y el desconocimiento de los marcos contextuales hace que se establezcan unas interpretaciones falsas, interpretaciones completamente alejadas de su sentido e intencionalidad original, interpretaciones que confunden y no llevan realmente a la novedad de vida que supone Jesús y su proyecto, y es así como se da pie para que algunos/as piensen que definitivamente la fe es una alienación… (detrás de todo esto es que hay que confrontar explicaciones de milagrerías, falsas concepciones en torno del poder de Dios, etc.)

 

 

2. Acercamiento Literario.

 

Algunas reflexiones para el estudio que surgen de la mirada de esta parte del evangelio en medio de las reflexiones anteriores son:

 

– Son las mujeres quienes previamente han indicado el mandato de Jesús de ir a Galilea, pues allá verían a Jesús. Ya de por sí esto es muy significativo en medio de una sociedad andrógena (machista) como la cultura judía que fueran las mujeres quienes primero supieron de la resurrección (v. 7) y fueron las primeras en el encuentro con Jesús (vv. 9 y 10)… ellas anuncian lo nuevo… en ellas ya se ha producido la dignificación, el “levantarse” del que también en esta narración será sujeto Jesús… Acoger a quienes han sido tradicionalmente marginalizados y empobrecidos para dignificarlos, para devolverle todo aquello a lo que tienen derecho y les ha sido conculcado… esta es la tarea de la comunidad cristiana, de la Iglesia, de ahí el testimonio para el mundo, como contraste – conflicto con el mundo.

 

– Así entonces nos encontramos en Galilea (v. 20)… y en un monte: en la tradición de Israel el monte es el lugar de Dios, desde donde habla, desde donde enseña, desde donde revela el estilo de vida para construir la justicia (cfr. 5, 1 – 12 las bienaventuranzas se dan en el monte)

 

Pero además, Galilea es el lugar donde empezó el ministerio de Jesús; Galilea es también el lugar de la rebeldía contra las autoridades injustas, pues ahí se organizan y realizan varias manifestaciones contra Jerusalén y contra el templo a lo largo de la historia (acababan de vivir la llamada “Guerra judía contra Roma” de la que había tenido como resultado la destrucción del templo y era una de las razones de por qué estas comunidades cristianas habían llegado hasta Siria… y todo se había organizado desde Galilea); por tanto podemos considerar a Galilea como un símbolo de resistencia y de búsqueda de la justicia.

 

De lo anterior es posible deducir que ir a Galilea, al monte… es indicar a los/as discípulos/as que han de empezar ahí su vida y ministerio de adhesión y seguimiento, es hacer el camino como lo ha hecho Jesús.

 

– Hay tres palabras que son claves en el relato por su ubicación en repeticiones o por la centralidad dentro del mismo (no olvidar que me ubico en el contexto de todo el capítulo 28): Acercarse; Adorar y Dudar… lo mismo que es clave el contraste entre cielo – tierra.

 

Nótese que en este relato NO aparece la ascensión al cielo, pues esta es narración de otro evangelio… generalmente se cae más en una explicación tradicionalista y no en el sentido mismo que está en el evangelio… por ello la importancia de las palabras de las que se hizo mención.

 

El Ángel se acerca, las mujeres se acercan, Jesús se acerca… es la tarea de la comunidad de discípulos. En medio de las condiciones de vida como las narradas arriba, en medio de las preguntas e inquietudes en torno de Jesús y su mesianismo una clave de comprensión del sentido de lo que hace Dios en Jesús es precisamente el “acercarse”… no es esperar a que vengan, la iniciativa es de Dios, de Jesús, de las mujeres, de la Comunidad… acercarse para acompañar el camino, acompañar frente a las dudas, acompañar en medio del sufrir la exclusión, el rechazo y la persecución, acompañar en la constitución de una comunidad que establece nuevas relaciones, por tanto nuevo sentido de vida, orientado por la justicia…

 

El acercarse y realizar la misión es precisamente el adorar, ahí está el adorar a Jesús… y el evangelio es explícito: no es quedarse en la figura de Jesús para adorarle a él de manera etérea o abstracta en una oración aislada de la realidad y de los/as hermanos/as e concreto… es en las personas concretas que hay en el mundo… en ellas es que ha de realizarse el discipulado… en ellas se vive el bautismo

 

Y aunque se dude. Es interesante observar que no hay comentario en boca de Jesús, ni del narrador… simplemente aparece como una constatación… ¿De cuántas maneras se puede interpretar esta constatación y silencio?

 

– Centrémonos en el mandato: Vayan y Bauticen en el nombre del Padre, Del Hijo y del Espíritu Santo… para nosotros/as hoy, por aquello que podríamos mal llamar “cultura cristiana”, hemos perdido el sentido, valor y fuerza que implican estas palabras… Dar el nombre de Padre a Dios es toda una novedad que sólo aparece en el cristianismo, él es el autor de la Vida y, al mismo tiempo, es en quien se establecen nuevas relaciones entre las personas y de cara al mundo… las relaciones de la justicia, él es el inspirador.

 

Así el Hijo es quien las comprende, las asume, las hace suyas… las realiza. Ahí la centralidad y valor de Jesús como hijo (heredero – continuador del proyecto)… y el Espíritu es continuidad de ese proyecto donde se centra la voluntad de Dios para que haya Vida en medio del despojo, la persecución, la exclusión, etc.

 

El espíritu muestra el camino de la justicia que es voluntad de Dios… que no se indica por voluntad de ningún otro sino que es de Dios…

Hemos de preguntarnos en y desde nuestras comunidades por ese don del proyecto que nos inspira… cómo se dan nuestras relaciones… cómo trabajamos para devolver la dignidad… qué hacemos para instaurar la justicia, no según nuestra voluntad, sino según la voluntad de Dios

 

Y hay tanto para seguir…

 

 

3. Acercamiento Teológico – Pastoral.

 

El evangelio nos invita y anima a seguir el camino andado por Jesús, camino narrado a lo largo del evangelio, por ello el final pone en un horizonte de camino la misión de los/as discípulos… así que hemos de ponernos en camino. No dice que nos quedemos esperando a que venga la gente, sino que salgamos hacia donde están las personas, sus alegrías, sus dificultades, sus esperanzas... Salir con el corazón henchido de la fe vivida, y que nos comprometamos en el empeño de trabajar para que nuestro mundo sea más justo, más solidario, más limpio, más fraterno, más libre, más pacífico, más feliz… Ahí está la fe vivida.

 

La autoridad sube cuando uno se baja, “sirviendo, más que mandando” (Sn. Benito), aquí un juego bien interesante para hablar del cielo y de la tierra… en lugar de pensar dónde está el cielo, qué mejor es pensar lo que implica decir que estamos y vivimos en el cielo, es decir, según la voluntad de Dios, según la justicia de Dios.

 

El evangelio No dice “estarán conmigo en el cielo” sino que dice: “yo estoy con ustedes”. Jesús está con nosotros en la realidad cotidiana, en la brega diaria, en la alegría de los avances realizados por constituir el reino…

 

De tantas maneras nos invitan a vivir…

 

Va mi abrazo fraterno y de recuerdo… que vivan una feliz semana en medio de nuestro quehacer cotidiano anunciando el reino en el nombe del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.

 

Dios les guarde.

Fraternalmente en Jesús, Señor de la Vida.

César

 

Para quienes quieran comunicarse con Samuel y las comunidades de Monpox y expresar su solidaridad aquí el correo electrónico a través del cual se pueden contactar:

* Samuel Martínez Larios <slmartinez145@hotmail.com>, 

 

Cesar Augosto Baratto

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